Está presa, pero le llueve la guita: cómo hace Morena Rial para seguir facturando

 Tras ser detenida nuevamente esta semana, Morena Rial fue trasladada a la Unidad Penal N°51 de Magdalena, donde permanecerá hasta que se resuelva su situación judicial. La hija de Jorge Rial había obtenido anteriormente una excarcelación por ser madre de un bebé, pero esta medida fue revocada tras incumplir varias condiciones impuestas por la Justicia.

Redes sociales activas desde prisión

A pesar de su detención, Morena Rial mantiene sus ingresos gracias a la gestión de su community manager, quien se encarga de administrar sus cuentas, organizar su agenda y cerrar acuerdos comerciales. Su cuenta de Instagram, con 1,3 millones de seguidores, sigue recibiendo visitas y promocionando productos, desde casinos online hasta servicios de tarotistas, lo que le permite mantener su presencia digital y sus ingresos publicitarios.

 Algunos usuarios criticaron esta estrategia y le sugirieron buscar un trabajo convencional "como una persona común", pero el equipo de Morena sostiene que las publicaciones continúan generando oportunidades económicas significativas.

Motivos de su nueva detención

El fiscal a cargo del caso detalló que Morena incumplió con la obligación de presentar constancias de tratamiento psicológico-psiquiátrico, no justificó ausencias en presentaciones judiciales y no acreditó medios de subsistencia. Esto derivó en la revocación de su excarcelación y en la orden de detención inmediata.

Morena está imputada por robo agravado por efracción y escalada, tras un hecho ocurrido el 18 de enero de 2025 en Villa Adelina, partido de San Isidro. Según la acusación, junto a otras personas forzó una ventana y sustrajo pertenencias, incluyendo una libreta. La modalidad utilizada, conocida como escruche, implica ingresar a viviendas deshabitadas mediante la efracción de aberturas.

Futuro judicial incierto

Además del robo agravado, Morena enfrenta otra causa por robo en banda, lo que complica aún más su situación legal. La defensa trabaja en un recurso para solicitar prisión domiciliaria con tobillera electrónica, mientras que la influencer realizó incluso una huelga de hambre como forma de protesta.

Su futuro judicial sigue siendo incierto y dependerá de las decisiones de la Justicia en relación a las pruebas y los recursos presentados. Mientras tanto, sus ingresos siguen generándose gracias a la gestión de sus redes sociales desde prisión.