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Revelaron la verdadera identidad del cuerpo hallado en el fondo de la casa de Gustavo Cerati

El hallazgo reabre una causa marcada por décadas de silencio e impunidad.

QPJ Zapping

Una investigación que comenzó meses atrás dio un giro conmocionante al confirmarse la verdadera identidad del cuerpo hallado enterrado en la casa lindera a la que Gustavo Cerati alquiló entre 2001 y 2003. Se trata de Diego Olmos, un adolescente de 16 años que desapareció en 1984, y cuya familia lo buscó incansablemente durante décadas.

El hallazgo se produjo durante una excavación por obras en el patio de la vivienda, ubicada en el barrio porteño de Belgrano. La escena fue tan inesperada como escalofriante: el cuerpo llevaba décadas sepultado, y tras meses de trabajo del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), finalmente se pudo confirmar su identidad.

Diego Olmos era estudiante de la ENET N°36 y jugador juvenil del Club Excursionistas. El día de su desaparición, salió vestido con su uniforme escolar, pero nunca llegó ni al colegio ni al club. Desde entonces, su familia no dejó de buscarlo: su padre murió sin saber qué pasó con él y su madre mantuvo intacta su habitación durante 40 años.

Los peritajes revelaron que Diego fue asesinado con una herida cortopunzante en la zona del tórax, a la altura de la cuarta costilla derecha, y que hubo un intento de descuartizamiento, lo que indica una muerte violenta. El crimen, ahora reactivado, abre interrogantes sobre quién vivía en la casa al momento del asesinato y qué vínculos podrían haber con el joven.

Una de las pistas apunta a una familia de origen alemán que residía en la vivienda durante los años ‘80. Marina Olmi, hermana del actor Boy Olmi, contó que compró la propiedad hace 30 años "al hijo de una señora alemana, Olga Schuddekopf", y que al hacer reformas, notó presencias extrañas y zonas sospechosas, como una casilla de madera en el jardín que fue demolida.

El caso conmueve no solo por su cercanía con una figura icónica como Gustavo Cerati, sino por el dolor acumulado durante cuatro décadas de silencio. "Nos quejamos, buscamos, fuimos a los medios, pero nadie investigó", había declarado el padre del joven años atrás.

Ahora, con la identidad del cuerpo confirmada, la investigación se centra en reconstruir cómo, cuándo y por qué mataron a Diego, y quiénes son los responsables de haber ocultado su cuerpo durante tanto tiempo.

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