La bala que podría frenar al Familiar: "Esta noche salimos a cazarlo"
Aseguran haber encontrado varios túneles en el ex Ingenio Tabacal. "Si no volvemos hasta las 5 de la mañana, llamá a la Policía", le dijo un hombre a su mujer.
El miedo se transformó en acción. Varios hombres decidieron organizarse y salir esta misma noche a cazar a El Familiar, la criatura legendaria que habría sido vista nuevamente en los túneles subterráneos del ex Ingenio El Tabacal, en el departamento de Orán.
"Si no volvemos hasta las 5 de la mañana, llamá a la Policía", le dijo un hombre a su mujer antes de prepararse para la cacería, junto con "los changos del barrio".
Convencidos de que la criatura es real y que representa una amenaza, especialmente ahora que hay niños en casa por las vacaciones, los vecinos aseguran que lo único que puede matarlo es una bala de plata, como si se tratara de un hombre lobo.
"Esto no es un perro ni un puma. Lo que está allá abajo es otra cosa. Y no va a morir con una bala común", explicó uno de los organizadores, que lleva días preparando linternas, machetes y municiones.
La supuesta madriguera de El Familiar
Todo comenzó luego de que trascendieran imágenes tomadas en los pasadizos oscuros de la Usina Vieja del Tabacal, donde trabajadores aseguran haber visto una figura inhumana con brazos largos y movimientos antinaturales. Las fotos, difundidas por el medio Orán Al Momento, despertaron el pánico en la región.
El lugar -según testimonios- albergaría la madriguera del temido Familiar, una criatura asociada a pactos demoníacos que, según el folclore del norte argentino, se cobra vidas a cambio de poder económico.
La leyenda se remonta a 2014, cuando un operario que ingresó solo a inspeccionar un túnel fue atacado por un ser que lo arrastró desde la oscuridad. El hombre logró escapar, pero renunció a su trabajo y nunca más volvió al ingenio.
Temor entre las familias
Mientras tanto, los vecinos se preparan como si estuvieran ante una amenaza real, con la firme convicción de que esta noche podrían enfrentarse cara a cara con la bestia. "Ya tenemos el grupo, las linternas... ahora solo falta encontrar la bala de plata", dijo uno de los hombres con tono serio.
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