Horror en Jujuy: acusan a los hijos de una mujer por el brutal doble crimen de su madre y su pareja

Una escena escalofriante sacudió a la tranquila localidad de Palma Sola. En una vivienda del barrio Aguas Negras, un doble crimen conmocionó a toda la comunidad: Juan Carlos Lizarazu, de 67 años, y María Petronila Vázquez, de 50, fueron asesinados a puñaladas durante la madrugada del miércoles pasado. La hipótesis más estremecedora se confirmó horas después: los principales acusados del crimen son los propios hijos de una de las víctimas.

Según El Tribuno, la autopsia realizada en la morgue del Centro Judicial de San Pedro de Jujuy reveló que ambas víctimas fallecieron por "insuficiencia cardiorrespiratoria, por shock hipovolémico, debido a heridas punzocortantes en tórax y abdomen". Es decir, murieron desangrados tras recibir múltiples puñaladas.

Los cuerpos fueron hallados por la madre anciana de Lizarazu, una mujer de edad avanzada que convivía con la pareja. El jueves por la mañana, al notar que su hijo no se levantaba para asistirla ni le daba su medicación, se levantó y descubrió el cadáver tirado en el suelo y ensangrentado. Salió a la calle gritando desesperada por ayuda. La policía llegó minutos después y encontró también el cuerpo de María Petronila, tendido en otro sector de la vivienda.

Lo que en un primer momento parecía un femicidio seguido de suicidio o incluso un robo, se transformó rápidamente en una pesadilla aún más atroz: la investigación apuntó directamente a los hijos de Petronila como autores del sangriento ataque.

La audiencia de imputación se realizó anoche en San Pedro, luego de que la fiscalía reuniera pruebas clave. En el lugar estuvieron presentes el fiscal regional José Alfredo Blanco, el coordinador de fiscales Juan Baiud, peritos criminalísticos y funcionarios judiciales. Los dos imputados -una mujer y un hombre- son hijos de la mujer asesinada.

Según se informó, tras la autopsia los cuerpos fueron entregados a sus familiares y trasladados nuevamente a Palma Sola para el velorio e inhumación.

Mientras tanto, la justicia busca entender qué motivó un acto tan brutal y desgarrador, que dejó a una madre sin hijos, a una anciana sin familia, y a toda una comunidad sumida en el estupor./El Tribuno