Brutalidad y sangre fría: cómo procedió el chacal para asesinar a Emilse
La joven santiagueña había cumplido 18 años un día antes. El principal acusado, empleado municipal, la habría matado con una correa y luego asistió a una cena de trabajo como si nada hubiera ocurrido.
El brutal crimen de Emilse Camila Barrera, una joven de 18 años asesinada en la ciudad santiagueña de Frías, estremece al país. La investigación apunta a Eduardo "Paisa" Pallares, empleado municipal, como autor del femicidio. Según los informes forenses, la víctima murió por asfixia manual y fractura en el cuello, presuntamente provocadas con la correa del llavero de su moto.
Tras cometer el asesinato, Pallares habría regresado a su casa, se bañó y asistió a una cena de empleados municipales el sábado por la noche, mientras el cuerpo de la joven permanecía abandonado. Emilse había cumplido 18 años apenas un día antes y, según las primeras averiguaciones, había pactado un encuentro con el acusado en la intersección de Catamarca y la ruta nacional 157.
El querellante, Franklin Moyano, confirmó que la joven atravesaba una situación de vulnerabilidad, con problemas de adicción, y reclamó una investigación más amplia sobre una presunta red de explotación sexual que involucraría a menores. "Camila era víctima de un entorno muy oscuro. Hay que ir tras quienes la ofrecían y contrataban", declaró.
El crimen expuso un entramado de relaciones y sospechas que sacuden a la comunidad. Se investiga a otros posibles implicados, entre ellos un hombre de apellido Juárez y dos mujeres, María Emilia y Estefanía, señaladas por presuntamente coordinar los encuentros de menores con adultos.
Los peritos confirmaron que Emilse fue estrangulada y que presentaba signos de defensa: habría arañado el rostro de su agresor, detalle que será clave en el análisis de ADN. En el allanamiento del domicilio de Pallares, los investigadores secuestraron el celular de la víctima, pieza central para reconstruir sus últimas horas y los contactos previos a su muerte.
El detenido permanece alojado en Frías y sería trasladado en las próximas horas a la capital santiagueña. No cuenta con abogado particular y se prevé que sea asistido por la defensa oficial, aunque podría negarse a declarar.
Familiares y amigos despidieron a Emilse entre el dolor y la indignación. Su muerte, marcada por la brutalidad y la indiferencia de su presunto asesino, generó un profundo impacto en la comunidad./El Liberal
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