Tras la polémica, el padre Maccagno aclaró sus dichos

Luego de haber generado una fuerte controversia con sus declaraciones sobre la imputación al sacerdote Atilio Luis Bruno, el padre Germán Maccagno emitió un comunicado para aclarar el sentido de sus palabras y despegarse de cualquier interpretación que pudiera sugerir una defensa del acusado.

"Con la intención de ofrecer una correcta interpretación de una expresión vertida por mí en el contexto de una entrevista, quiero expresar que de ninguna manera avalo ninguna conducta inapropiada de índole de contexto de violencia, ni cualquier otra acción que sea digna de reprobación", sostuvo el sacerdote en su mensaje.

El pronunciamiento llegó luego de que Maccagno pidiera a los fieles "comprender las debilidades que también los sacerdotes podemos tener", frase que fue leída por muchos como una justificación frente a los abusos denunciados.

En aquella entrevista, el cura también había señalado que la Iglesia pedía "perdón humildemente" y que se ponía "a disposición de la Justicia". A su vez, recalcó que el padre Bruno ya no está a cargo de ninguna comunidad y que el obispado aceptará lo que determine la investigación judicial.

El nuevo comunicado intenta reparar el malestar que provocaron sus palabras iniciales. "Poniendo toda nuestra colaboración a la Justicia en lo que requiera la investigación", concluyó Maccagno.

El sacerdote imputado, Luis Bruno, fue apartado de su cargo días antes de que se emitiera la orden de detención y se allanara su residencia. La investigación judicial sigue su curso, mientras crece la conmoción en la comunidad católica jujeña.