"Tamara era como una tía para mí": jujeñito le compuso un rap para pedir justicia
Con solo 12 años, Maximiliano Gutiérrez decidió transformar su dolor por el femicidio de Tamara en un potente mensaje de memoria y lucha.
Tamara no era de su familia, pero para Maxi era como una tía. Su presencia cálida, los abrazos compartidos y la complicidad en cada reunión la volvieron parte esencial de su infancia. Cuando se enteró de que su vida había sido arrebatada en un femicidio en Fraile Pintado, algo se rompió dentro de él. Tenía 12 años y no pudo dormir. Lloró muchas noches. Pero también decidió no quedarse en silencio.
El pasado viernes, Maximiliano Gutiérrez canalizó su dolor en palabras y compuso un rap que conmueve por su fuerza, su ternura y su llamado urgente a la justicia. En la letra, menciona a Tamara, pero también a los jueces, a la sociedad y a las miles de mujeres víctimas de violencia que ya no están.
"No más impunidad, no más silencio. Justicia para Tamara, y por todas las que fueron calladas", escribió.
Maxi es hijo de una amiga de Tamara. Su vínculo nació en las rondas familiares, donde Tamara siempre tuvo un gesto cariñoso para él. Ahora, en su ausencia, decidió alzar la voz no solo por ella, sino por todas.
El rap que escribió no es solo un homenaje: es un grito. Un reclamo. Una canción que pide que la memoria de Tamara no se apague y que su caso no quede impune. Porque como él mismo lo dice en su verso final:
"Tengo mamá, tengo hermana, tengo tías y también tengo amigas. Y por todas ellas le pido a la justicia que se termine el femicidio".
En un país donde una mujer es asesinada cada 35 horas, la voz de Maxi, tan joven como clara, nos recuerda que no se necesita ser adulto para entender lo injusto. Basta con sentir, con querer, con haber compartido abrazos.
Con su rap, Maxi no solo honra la memoria de Tamara: también nos obliga a todos a escuchar.
FUENTE: INFOYUNGAS
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