Se llevan todo

En la frontera no reciben pesos argentino y bolivianos aprovechan la devaluación

Desde el vecino país vienen a comprar aceite, harina y cervezas.

QPJ JUJUY

En Villazón, la ciudad boliviana situada junto a La Quiaca, los efectos de la reciente devaluación del peso argentino tras las Elecciones Paso se están haciendo sentir con fuerza. Durante la jornada de ayer, la moneda argentina dejó de ser aceptada en cualquier tipo de transacción en esta localidad, como resultado de la significativa depreciación que sufrió después de los comicios.

En las casas de cambio de Villazón, antes de que se suspendiera la aceptación de pesos argentinos, un peso boliviano estaba siendo tasado a 100 pesos argentinos. Esta cifra contrasta notoriamente con la situación de hace apenas unos días, cuando la misma cantidad de pesos argentinos equivalía a 1,20 bolivianos.

El desenlace de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias llevó al Gobierno argentino a devaluar el peso en un 25 por ciento respecto al dólar oficial, a solicitud del Fondo Monetario Internacional. Como resultado, la cotización oficial del dólar se estableció en $365, mientras que el dólar paralelo alcanzó los $695, aunque luego descendió en diez pesos para ubicarse en $685.

Es importante mencionar que en el vecino país, Bolivia, el dólar cotizó oficialmente a 6,92 bolivianos durante la jornada de ayer. Si se traduce a pesos argentinos, esta cotización resulta similar a la del dólar blue o paralelo en Argentina.

Es relevante señalar que los residentes de Villazón están aprovechando esta favorable tasa de cambio para adquirir alimentos y otros productos en La Quiaca. Esto subraya cómo las fluctuaciones en las tasas de cambio pueden tener un impacto significativo en los hábitos de compra y en el comercio transfronterizo.

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